El podcast de hoy, tal como lo dice el título, son mis mejores tips para aquellos estudiantes de idiomas que los he aprendido como docente de lengua extranjera y también como estudiante. Tuve que seleccionar aquellos elementos más importantes como docente y también como estudiante porque hay cosas que he aprendido con la propia experiencia. Esta es la no ser una persona bilingüe desde mi nacimiento. El haber aprendido inglés como adulta me ha permitido vivenciar en mi propia persona todos aquellos elementos a los que se enfrenta un estudiante de español porque yo sé exactamente lo que se siente porque lo viví y lo vivo aún porque aún sigo aprendiendo.
El primer tip, el primer consejo, el primer elemento y no por importancia sino es el primero que me viene a la mente siempre, tal vez el más habitual al cual nos enfrentamos cuando aprendemos una lengua, es el miedo al fracaso, la sobreexigencia y la opinión del otro. Estos tres elementos van juntos pero voy a centrarme sobre todo en la sobreexigencia. Es algo inevitable prácticamente a esta altura porque vivimos en un mundo en el cual el fracaso, el error no es algo que esté bien visto. Aprendamos lo que aprendamos, siempre tenemos el miedo al fracaso incorporado. Es una cuestión cultural. Yo lo veo con mis estudiantes en las escuelas, lo veo con los adultos y lo vivencio. Es algo mucho más común de lo que realmente yo quisiera.
En lugar de ver al fracaso y al error como una oportunidad de aprender, de crecer, de hacer las cosas mejor y como algo natural de un proceso, lo vemos como ¡qué horrible me equivoqué en esto! Y estoy hablando, trayéndolo al tema específico del aprendizaje de un idioma, cuando me equivoco en el género de una palabra, cuando me equivoco en los artículos, cuando me equivoco en cosas muy sencillas que forman parte de un nivel básico del español y no logro entender por qué me confundo con cosas tan básicas. Entonces ahí comienza una especie de castigo, de autoflagelación. Me torturo a mí misma diciendo ¿cómo puedes equivocarte en cosas tan sencillas? Y sí, y sucede, porque nuestro cerebro está pensando en un idioma que no es nuestro idioma nativo y necesita pensar las palabras.
Nos sentimos incluso como niños, porque los errores son básicos, porque nos da mucha vergüenza intentar batallar con un idioma mientras nuestro interlocutor está esperando por nosotros. Nos exigimos porque no queremos hacer sentir al otro que somos lentos, porque también existe esta otra idea de que si no somos brillantes y no tenemos una mente súper dotada, entonces no somos buenos, no somos merecedores de la paciencia del otro. Hay cuestiones muy crueles en nuestro mundo actual que realmente no contribuyen a este proceso de aprender algo, sea un deporte, aprender a esquiar o aprender un idioma.
Por tanto, esta sobreexigencia nos lleva a que la opinión del otro pase a tener un peso muy importante y nosotros al hablar con alguien nativo nos sentimos hablantes de segunda categoría. Me viene a la mente en este momento el primer podcast que hice de esta temporada, que es la primera por cierto, en el cual hacía especial énfasis en por qué tenemos que hablar como un nativo. Te recomiendo porque es un podcast que ha ayudado a muchas personas a bajar el nivel de ansiedad, a bajar el nivel de exigencia.
En ese podcast hablo de la importancia de reconocer nuestro trabajo y que no somos hablantes de segunda categoría porque simplemente no somos nativos. Esta vergüenza con la que yo tengo que lidiar cada vez que hablo español con alguien, necesito reconocerla. Necesito asumir que me da vergüenza hablar con otra persona, que necesito tenerme paciencia y si la otra persona quiere escuchar lo que yo tengo para decir, me tendrá paciencia.
Por supuesto que existen circunstancias muy variadas en este mundo y a veces tenemos prisa y a veces necesitamos resolver situaciones en que el otro no puede esperar, eso es claro. Sin embargo, a veces, la mayoría de las veces nos apuramos a nosotros mismos mucho más que lo que hacen las demás personas. Sí es cierto que a menudo en el otro genera cierta ansiedad vernos batallar con nuestros pensamientos tratando de seleccionar el verbo correcto, conjugarlo en la forma correcta, en el tiempo adecuado y más aún si son ideas abstractas o complejas o en el cual debemos contrastar ideas.
Y aquí viene el segundo problema que tiene que ver con lo mismo que es que no podemos evitar a veces que las personas en su afán de ayudarnos no nos dejan terminar de decir lo que queremos decir y lo que hacen es completar nuestras frases porque adivinan lo que queremos decir. Eso es un acto reflejo, sucede todo el tiempo con la mejor intención de ayudarnos porque no nos quieren ver batallar. Por lo tanto, el primer consejo, el primer tip que tengo para ti es que logres o que intentes al menos bajar tu nivel de exigencia y de auto evaluación.
En lugar de estar tan pendiente en tus errores, pon el foco en los logros, en felicitarte cuando logras expresar una idea compleja y con errores o sin ellos has logrado que la otra persona te comprenda. Y si lo lograste en un 50% bien, valorar nuestros logros porque es muy habitual que internamente nosotros no podamos notar la diferencia entre nuestro español del 2024 a nuestro español del 2021. No logramos notar la diferencia, por eso es importante bajar este nivel de sobreexigencia.
El otro tip que tengo y tiene que ver con lo mismo es que es realmente muy efectivo, nunca me cansaré de aconsejarlo lo suficiente, que puedas de alguna manera lograr encontrar una persona con la cual hablar y practicar tu español. Puede ser un nativo, puede ser alguien que esté en tu nivel o alguien que tenga un poco más de nivel que tú, pero que sean personas con la cual tú puedas generar un diálogo que pueda generar la confianza en la corrección y a su vez con el paso del tiempo, luego de varias reuniones constantes, pueda la otra persona hacerte una devolución en tu mejora, así como tú le puedes hacer a la otra persona correcciones. El simple hecho de compartir, compartir vocabulario, incluso ideas o podcast o lecturas.
Aprender con el otro es una de las cosas más maravillosas que tenemos como seres humanos. Además, teniendo en cuenta que si estamos aprendiendo una lengua para comunicarnos con los demás, bueno, es momento de lograr encontrar una persona. Las redes sociales hoy nos permiten un montón de opciones.
Si no vives en una comunidad que haya personas que hablen español como para hacerlo en forma habitual o simplemente animarte a hablar cuando vas a algún lugar donde hay una persona que habla español, tal vez te animes a decirle un par de palabras. Verás que en general las personas son amables contigo, logran empatizar contigo. Se generan estas cosas maravillosas de no sé si eres consciente realmente de lo maravilloso que es para una persona de habla nativa escuchar que hay alguien que está haciendo el esfuerzo por hablar tu lengua. Es algo maravilloso.
El segundo tip que te doy tal vez sea el más efectivo de todos y es realmente incluso muy divertido. Grábate en tu lengua materna con cualquier dispositivo hablando sobre un tema del cual tú sepas. Puede ser desde cómo se practica cierto deporte, desde las instrucciones para llegar a la tienda, lo que tú quieras. Lo tienes que armar en el momento. Esa es la clave. No puedes ser leído, tienes que grabarte hablando o una conversación con alguien. Incluso puedes tomar cualquier audio que tengas que le hayas enviado a alguna persona. Un minuto, dos minutos, no tiene por qué ser más que eso. Y lo transcribes con una aplicación de IA que hay un montón, muy eficaces. Y luego que tengas la transcripción en tus manos, léela. Verás que en tu lengua materna existen un montón de errores que tú cometes al hablar todo el tiempo. Y eso es algo normal y lo tenemos incorporado y nadie te corrige por ello. Te equivocas en el género, en la conjugación de las personas, te corriges en el momento y ¿qué haces? Continúas hablando y no pasa nada con eso.
Eso te sucede cuando tú hablas español. Pero ¿qué nos encontramos? Que tus expectativas con el español son mucho más altas que las expectativas con tu lengua materna. ¿Y eso por qué sucede? Eso sucede por la sobreexigencia. Nunca, nunca hablamos de la misma manera que escribimos. Y nosotros, por alguna razón, pretendemos hablar una lengua extranjera que la aprendemos de forma muy diferente a nuestra lengua nativa. Pretendemos hablar con la exactitud de un texto escrito y nunca, nunca funcionan de la misma manera. Las únicas personas que deberían hablar de forma exacta y correcta son las personas que trabajan, por ejemplo, en las noticias, los presentadores de televisión. Cuando estamos ante un noticiero, cuando estamos hablando de una persona que está haciendo una entrevista, allí sí observamos exactitud en las palabras, en las preguntas, en cómo se formulan las ideas. Pero para eso se estudia y se estudian muchos años.
Nadie habla como un presentador de televisión o como las personas del noticiero. Eso no sucede. Sucede sólo nuestra mente que nos sabotea constantemente y nos hace creer que deberíamos hablar como ellos. Y no, no sucede. Por eso te recomiendo, te recomiendo mucho que te grabes y observes lo que estoy diciendo porque es muy clarificador. También puedes utilizar, por cierto, las transcripciones de este podcast. Yo no corrijo las transcripciones. Sí, a veces alguna puntuación, pero todo está allí. Y los errores en número que cometo o en género o errores de estructura o lo que fuese, todo está allí.
Está para que tú lo puedas leer y observas que la forma en que hablo no es la forma académicamente correcta que podría tener un artículo escrito porque lo estoy hablando. Realmente te lo recomiendo. Vamos a pasar ahora a otro tema que no es el tema de la exigencia o sí y tiene que ver con esto del resultado inmediato.
Estamos en un mundo en el que todo tiene que ser ahora y yo te propongo que tú disfrutes del proceso. Por supuesto que si necesitas tomar un examen de español para alguna universidad o por un trabajo, claro que los tiempos son otros y necesitas mejorar rápido, pero es muy probable que después de dar tu examen y quieras continuar mejorando tu español o simplemente si lo estás aprendiendo para poder vincularte mejor en la comunidad en la que vives o simplemente por ejercitar tu cerebro, recuerda que esto es un proceso y es un ejercicio que nos puede llevar años y está bien que sea así. Estamos acostumbrados a que lo importante es el resultado y cuando hablamos de deportes, por ejemplo, ¿por qué hacemos un deporte? ¿Más allá de para qué? Para mantener nuestra salud, para distendernos, para disfrutar, para estar con amigos, para pasarla bien.
¿Por qué entonces una lengua tiene que ser diferente? ¿Por qué no podemos pensar que aprender español es algo que tú disfrutas como un hobby, como un deporte y simplemente disfrutas el proceso? Piénsalo. A demás, en general, practicamos deporte porque nos gusta, nos gusta hacerlo y claro, cuanto más practiquemos, seremos mejores, pero no lo hacemos por eso, lo hacemos porque nos gusta. Te propongo que este aprendizaje que llevas adelante del español sea un disfrute diario o semanal, que sea simplemente un entretenimiento más, aunque lo estés aprendiendo por trabajo o por estudios, pero que logres encontrar el placer diario de poder comunicarte con alguien, escuchar una canción.
El último tip que te doy es animarte a viajar a algún país de habla hispana a menos que ya vivas en uno de ellos. Si ya vives en uno de ellos, entonces eso te ayuda mucho porque obviamente vas a escuchar todo en español. Entonces, eso ayuda mucho a la comprensión auditiva.
A la hora de practicar el habla, si bien va a ser más frecuente, la necesidad de hablar es mucho más difícil cuando no estamos en un país de habla hispana. Aunque vivamos en una comunidad que hay muchas personas que hablan español, no es lo mismo. Por lo tanto, si tú vives en un país donde no se habla español constantemente, entonces anímate, date la oportunidad en la medida en que puedas, por distancia, por tiempos económicos, por lo que sea.
Date la oportunidad en algún momento viajar, así sea de forma muy breve, a un país de habla hispana porque es algo que te va a cambiar mucho la perspectiva de tu confianza. Verás que si logras estar cinco días en un lugar que se hable español, ya a partir del tercer día tus oídos es como si de repente fluyeran y comienzas a percibir todo diferente y verás que no vas a identificar exactamente las palabras que dijeron los demás, pero sí vas a decodificar el mensaje. Esa experiencia es muy grata porque realmente cuando aprendemos otra lengua tenemos la necesidad de identificar todas y cada una de las palabras que escuchamos y eso es un ejercicio agotador y por otra parte no nos ayuda en nada.
Sin embargo, lo hacemos en forma inconsciente. Cuando viajamos a un país de habla hispana, en tu caso, verás que el mensaje lo recibiste, lo comprendiste, porque además el mensaje lingüístico se mezcla con otros mensajes, con otros códigos, el código de los gestos, de las imágenes, por tanto la comunicación incluye otros elementos que cuando estamos en un aula de clase o escuchando un podcast no los tenemos. Eso también hay que tenerlo en cuenta, además de que por cierto cuando viajamos se nos abren una infinidad de posibilidades, cómo se ve el mundo desde otros lugares, conocimientos culturales, conocimientos de historia, de olores, de comidas, de tradiciones, toda una cosmovisión, una forma de ver el mundo que nos abre mucho a cuestionarnos incluso nuestras propias creencias, nuestras propias costumbres, nuestros propios hábitos.
Realmente es una experiencia muy gratificante y si logras viajar con un intervalo de un año o de dos años al mismo lugar o a otro, será una prueba muy clara de cómo has mejorado. Recuerdo hace algunos años estuve en Londres por primera vez y cuando volví a ir en el 2023, la diferencia entre mi comunicación con las personas en las tiendas, en cualquier parte, fue completamente diferente. Esa experiencia es tan gratificante que realmente te motiva porque ves en un espejo cuál es tu realidad y puedes comparar.
Realmente te lo recomiendo. Por tanto, para cerrar este podcast, debo decirte que la forma que en general recomiendo de mejorar nuestro vocabulario, nuestro nivel del idioma que estemos aprendiendo es, primero y principal, ser objetivos con la crítica. Mejorar la sobreexigencia no nos conduce a ninguna parte y podemos contar con personas que colaboren con nuestro propósito si les pedimos que nos tengan paciencia o que simplemente no nos corrijan tanto, que no te corrijan tanto es importante.
Claro, es tal vez contradictorio a lo que siempre escuchamos, que el nativo te corrija y te diga esto sí, esto no, pero es frustrante y eso no te genera una motivación adecuada. Maneja tu sobreexigencia, sé objetivo con la crítica, disfruta el proceso, disfrútalo porque aprender otra lengua es algo maravilloso y anímate a viajar a un lugar de habla hispana o logra conectar con personas de diferentes nacionalidades que hablen español, sea nativo o no, no importa. Es naturalizar este proceso de aprender un idioma, naturalizar como quien practica un deporte.
Si logras incorporar esta analogía en tu mente, lograrás sentirte cómodo contigo mismo, contigo misma, reconocer todos los progresos que has logrado en todo el tiempo que hace que aprendes español y te vas a sentir muy satisfecho o satisfecha contigo mismo. Por tanto, hasta aquí llega el podcast de hoy. Ojalá que todos los tips que te he acercado te ayuden, te motiven, que es el propósito de este podcast y de mi proyecto de enseñar español a todas aquellas personas que quieran aprender.
Te recuerdo que puedes descargar las transcripciones de este y de todos mis podcasts a través del enlace disponible en la descripción o en el sitio web SpanishFluencyAcademy.com. Mi nombre es Sonia, gracias por estar allí. ¡Hasta el próximo episodio!